No todo van a ser exposiciones de dudas. Ahora, toca anécdota:
Suelo ir a tomar café con las dos secres que hay en el edificio. Cuando salimos o entramos, el madero que hay en la puerta nos dice "buenos días". Hasta ahí, bien.
A veces, nos acompañan algunas de las tres juezas que hay en el partido. Bien, cuando vienen ellas, no sólo nos abre la puerta, sino que refiriéndose a las mismas: "Buenos días, señoría/s", según el número...
Hay que joderse!
A mí, me da igual cómo me llame (o que no me llame), pero me

Quiero aclarar que a veces voy a tomar café con el chico de mantenimiento, vamos, que no es cuestión de que sea una estirada clasista.
Estamos pensando darle un "toquecillo" de atención porque no sabemos si lo hace por ignorancia o por mala baba...