Los jueces, de nuevo, mueven ficha
Publicado: Vie 12 Nov 2010 11:29 am
Una vez más los Jueces, al margen de asociaciones y colores, empiezan a mover ficha para quejarse. La última vez fueron 1400 los adheridos al manifiesto, y no les hicieron caso. A ver ahora que están cabreados por el recorte y la instruccioncita de marras lo que pasa. Os pego el texto del manifiesto que se ha circularizado entre ellos para que comiencen las adhesiones:
PROPUESTA FRENTE COMUN JUECES-ASOCIACIONES
1.- Situación actual de los Jueces tras el Manifiesto.-
Compañeros/as: Cuando en febrero del presente año sometimos a vuestra
adhesión el MANIFIESTO POR LA DESPOLITIZACION Y LA
INDEPENDENCIA JUDICIAL asumimos el compromiso de impulsar ese
movimiento activo y abierto a todos los sectores sociales, políticos e intelectuales del
país cuya última finalidad era la de promover y conseguir un GRAN PACTO DE
ESTADO en el que se plasmara el firme compromiso de restituir al Poder Judicial la
independencia y la dignidad constitucionalmente exigibles y avalada por resoluciones
internacionales. Un compromiso para cuya efectividad resultaba imprescindible se diera
plena satisfacción a los SIETE OBJETIVOS BASICOS siguientes: 1).-Elección
democrática de todos los órganos de gobierno interno del poder judicial, incluidas Salas
de Gobierno y Presidencias de Audiencias y TSJ. 2).-Mantenimiento en poder de los
jueces de sus funciones estrictamente jurisdiccionales, incluida la instrucción, en tanto
el M. Fiscal siga dependiendo del Ejecutivo . 3).- Elaboración de una nueva planta
judicial conforme a la media europea de 20 jueces/100.000 habitantes. 4).- Inversión en
justicia conforme a la media europea del 3,5% del presupuesto. 5).-Inmediata
consecución para los jueces de una carga de trabajo asumible que permita resolver los
asuntos con la prontitud y calidad que los ciudadanos merecen. 6).-Aprobación de un
nuevo estatuto judicial acompañado de una reforma de su régimen disciplinario que
termine con su inseguridad jurídica y con su régimen de responsabilidad prácticamente
objetiva y 7).-Establecimiento por ley de un sistema que garantice de manera definitiva
y estable su independencia económica para que no quede sujeta al arbitrio de cada
gobierno de turno.
Pues bien, los escasos meses transcurridos desde entonces han bastado para
evidenciar no sólo la total insensibilidad del Gobierno de la Nación y del CGPJ con
las inquietudes y reivindicaciones planteadas en el Manifiesto sino, peor aún, la
tenaz persistencia de ambos en continuar por esa misma senda expresamente
reprobada por más de 1400 jueces del país. Una senda que por parte del Gobierno
se ha materializado, entre otros aspectos en agudizar su actitud de mas absoluto desdén
hacia todas las asociaciones judiciales, hasta el punto de ni tan siquiera oírlas (tampoco
al Consejo) antes de aprobar mediante Decreto-Ley una reducción drástica y sin
precedentes de nuestros salarios que ha supuesto el mayor ataque perpetrado en nuestro
pais contra la independencia económica de los jueces, y en imprimir mayor celeridad
aún a su proceso de fragmentación y politización del Poder Judicial mediante la
articulación de proyectos legislativos específicamente encaminados a dar carta de
legalidad a la creación de 17 Consejos judiciales autonómicos y a atribuir la instrucción
penal a un M. Fiscal absolutamente dependiente del ejecutivo con paralela postergación
y restricción del democrático ejercicio de la acción popular a ámbitos meramente
residuales o testimoniales. Y todo ello con la complicidad tanto activa como pasiva
del CGPJ quien, no solo ha dejado en evidencia a tal respecto su tradicional posición
dócil al Ejecutivo sino que además ha despreciado ostensiblemente a los más de 1400
jueces firmantes del Manifiesto negándose reiteradamente a recibir a sus Impulsores. Ha
continuado impasiblemente efectuando la designación de cargos de la alta cúpula
judicial con el mismo sistema de cuotas (o reparto de cromos) reprobado en su día por
el TC. Ha incumplido notoriamente su solemne promesa de abanderar las
reivindicaciones de los más de 2100 jueces que siguieron la huelga del 18-2-2009 (en
especial, la del incremento del número de jueces y de la inversión en Justicia) pues
luego de mostrar tras esa huelga y la de octubre ciertos destellos de aparente
acercamiento a sus gobernados (plasmados en algunas flexibles interpretaciones de
nuestro rígido sistema de permisos), ha vuelto nuevamente a la senda dura iniciando,
por ejemplo, el trámite de aprobación de un proyecto de Reglamento de la carrera
judicial que recorta contra legem nuestro ya limitado y discriminatorio estatuto legal
en materia libertad de expresión, de permisos e incluso de nuestra misma libertad
deambulatoria, al tiempo que acentúa aún mas, en muy diferentes aspectos, nuestro
incomprensible status de responsabilidad objetiva por el funcionamiento de una oficina
judicial que nos es legalmente ajena. Proyecto que, en esa misma línea, ha sido seguido
de la más reciente aprobación de una Instrucción en la que, obviando el más elemental
principio de jerarquía normativa, efectúa un ilegal desarrollo de las residuales y
antinómicas facultades de inspección y dirección que anómalamente quedaron en el art.
165 de la reformada LOPJ y que, por su estrecha ligazón con nuestro catálogo legal de
infracciones disciplinarias, va a comportar de facto la definitiva consagración de nuestra
más absoluta responsabilidad objetiva por cualquier mínima irregularidad que suceda
en esa oficina judicial cuyo jefe es otro que, además, no depende legalmente de nosotros
sino del ejecutivo. Y todo ello mientras que, sin el mas leve destello de sensibilización
por parte de ambas instituciones gubernamentales, seguimos teniendo la mitad de jueces
que la media europea y hemos descendido en materia de independencia judicial según el
Word Economic Forum on Judicial Independence al “honorable” puesto numero 57,
detrás de Nigeria.
2.- Propuesta a todas las asociaciones y a los no asociados.-
Pero los Impulsores del Manifiesto, fieles al compromiso contraído con los
centenares de firmantes del mismo no estamos dispuestos a consentir por más tiempo
que esta situación de galopante politización y degradación de la carrera judicial
siga avanzando impunemente y de forma irreversible. Es por ello que, desde nuestra
condición de movimiento transasociativo y de base compuesto de asociados y no
asociados de todas las tendencias en pro de esos siete objetivos básicos de la carrera,
consideramos que ha llegado el momento de dar un firme y unitario PASO
ADELANTE que podrá cambiar sustancialmente la situación si contamos con los
apoyos individuales y asociativos en los términos que a continuación exponemos.
La petición de apoyo individual la dirigimos de manera especial a TODOS
LOS COMPAÑEROS NO ASOCIADOS para que, desde el máximo respeto a las
razones que les hayan podido llevar a no afiliarse a ninguna de las asociaciones
existentes hagan por primera vez un PARENTESIS EXCEPCIONAL Y MERAMENTE
TEMPORAL a su actual status pasando a engrosar de manera masiva e inmediata,
aunque limitada al tiempo máximo de UN AÑO, las filas de afiliados de
CUALQUIERA DE LAS ASOCIACIONES que en el plazo prudencial de 20 DIAS
manifiesten expresamente su COMPROMISO (mediante comunicado oficial dirigido
a esta misma red telemática) de llevar prioritaria y firmemente a cabo todas las
actuaciones que a continuación paralelamente les solicitamos.
Y la petición de apoyo asociativo la dirigimos a TODAS LAS ASOCIACIONES
JUDICIALES con el fin de que se comprometan con la consecución de los 7 objetivos
básicos del Manifiesto, en estrecha y coordinada colaboración con sus Impulsores, y
pongan en marcha a la mayor brevedad las actuaciones siguientes:
1).-Exigencia de Alta Mesa Negociadora.- Las asociaciones dispuestas a
aceptar esta propuesta se comprometen a exigir del Presidente del Gobierno de la
nación y del Presidente del CGPJ la constitución de una MESA NEGOCIADORA
AL MAS ALTO NIVEL (nunca a nivel meramente ministerial o del Consejo) en la
que se aborden como verdadero problema de Estado todas las cuestiones y objetivos
básicos planteados en el Manifiesto. Porque los jueces no somos meros funcionarios
sino un poder del Estado.
2).-Medidas contundentes de presión.- Las asociaciones aceptantes asumen
adoptar cuantas medidas constitucionales de presión progresivas y contundentes
fuesen necesarias, incluida una HUELGA GENERAL indefinida y discontinua de
jueces y magistrados, si en el plazo prudencial que la asociación o asociaciones
protagonistas de este proceso les fije (que sugerimos no supere los 15 DIAS) esas altas
Autoridades no hubieran dado respuesta afirmativa a aquella petición o, celebrado el
primer encuentro personal, no se hubiesen alcanzado acuerdos firmes en cuanto a la
constitución, objetivos y desarrollo de la Alta Mesa Negociadora. Reacción
movilizadora colectiva que igualmente debería adoptarse en cualquier momento en que,
pese a cumplirse esos primeros presupuestos, las negociaciones emprendidas no
hubieren alcanzado resultados satisfactorios relevantes y tangibles en el prudencial
plazo de UN MES. Porque los jueces estamos hartos de promesas volátiles.
3).-Convención Nacional de Jueces.-Paralelamente a todo lo anterior la
asociación o asociaciones aceptantes se comprometen a organizar y convocar una
CONVENCIÓN NACIONAL DE JUECES en el plazo máximo de DOCE MESES
con un doble objetivo: de un lado, para debatir de manera abierta y plural sobre todos
los graves problemas que afectan a la independencia del Poder Judicial en España y a
sus titulares, y de otro, para que todos los jueces y magistrados del país en servicio
activo a ella convocados procedan a elegir democráticamente (con las representaciones
tasadas que procedan) una Junta Nacional Jueces permanente y plenamente
representativa de todos los jueces y magistrados de España. Junta que una vez
constituida, se convertiría en la voz permanente de todos los jueces del país y, al propio
tiempo, en la única fórmula realista y plausible de unidad judicial con la que hoy por
hoy es posible responder a la todavía quimérica unidad asociativa. Porque los jueces no
podemos seguir mas tiempo sin una representación democrática a nivel nacional.
3.-Aclaración final.-
Con esta concreta propuesta los Impulsores del Manifiesto no pretendemos
vincular nuestra organización a asociación alguna ni delegar en ella la lucha por los
principios y objetivos a la que nos comprometimos al participar ese documento a toda la
carrera, como tampoco, por supuesto, está en nuestro ánimo generar ningún tipo de
división entre asociaciones o entre afiliados o no afiliados a las mismas, pues nada más
lejos quedaría del contundente mensaje de unidad que inspira y late intensamente en
todo el texto del Manifiesto. Lo que únicamente perseguimos con este doble envite a
todas las asociaciones y a todos los jueces no asociados (o incluso a aquellos otros
que, aun estándolo, quieran discrecionalmente mostrar de este modo su disconformidad
con la posición que adopte la cúpula de su asociación) es poner en marcha un sólido
FRENTE COMUN para cuyo éxito resulta indispensable engrosar
TEMPORALMENTE (y por muy breve plazo) las filas de cualquiera de las
asociaciones que se comprometan a llevar a efecto esta propuesta Porque sólo una
organización que disponga de una estructura asociativa integrada de una ingente base de
afiliados altamente reivindicativa podrá tener la fuerza y medios suficientes para llevar
fructuosamente a cabo esos objetivos.
Desde el Manifiesto nunca pediríamos ni pediremos a nadie la afiliación en
firme a alguna asociación concreta pues seria tanto como atentar contra la misma
esencia transasociativa de nuestro movimiento. Lo que aquí simple y llanamente
estamos pidiendo a los COMPAÑEROS NO ASOCIADOS es que, dada la situación
limite y extremadamente grave a que ha llegado ya la carrera se hace necesario un
extraordinario esfuerzo de unión solidaria por parte de todos que en el caso de los no
asociados pasa ineludiblemente por la toma de una decisión que sabemos les va a ser
muy difícil y dura: la de, en aras del bien de todo el colectivo judicial, ser capaces, por
una sola vez y de forma absolutamente excepcional, de dejar a un lado sus
arraigados recelos o profundas convicciones antiasociativas procediendo a
integrarse por muy limitado tiempo (máximo un año, o menos incluso) en
cualquiera de las asociaciones que decidan aceptar esta propuesta. Se trataría de un
gesto tan admirable y solidario, pero a su vez tan natural y coherente, como el que
hicieron tantos centenares de asociados y no asociados yendo a la dos huelgas de 2009
pese a no pertenecer o simpatizar con la asociación convocante.
Somos muchísimos los descontentos, usemos inteligentemente nuestra
fuerza.
A 10 de Noviembre de 2010
Los Impulsores del Manifiesto
PROPUESTA FRENTE COMUN JUECES-ASOCIACIONES
1.- Situación actual de los Jueces tras el Manifiesto.-
Compañeros/as: Cuando en febrero del presente año sometimos a vuestra
adhesión el MANIFIESTO POR LA DESPOLITIZACION Y LA
INDEPENDENCIA JUDICIAL asumimos el compromiso de impulsar ese
movimiento activo y abierto a todos los sectores sociales, políticos e intelectuales del
país cuya última finalidad era la de promover y conseguir un GRAN PACTO DE
ESTADO en el que se plasmara el firme compromiso de restituir al Poder Judicial la
independencia y la dignidad constitucionalmente exigibles y avalada por resoluciones
internacionales. Un compromiso para cuya efectividad resultaba imprescindible se diera
plena satisfacción a los SIETE OBJETIVOS BASICOS siguientes: 1).-Elección
democrática de todos los órganos de gobierno interno del poder judicial, incluidas Salas
de Gobierno y Presidencias de Audiencias y TSJ. 2).-Mantenimiento en poder de los
jueces de sus funciones estrictamente jurisdiccionales, incluida la instrucción, en tanto
el M. Fiscal siga dependiendo del Ejecutivo . 3).- Elaboración de una nueva planta
judicial conforme a la media europea de 20 jueces/100.000 habitantes. 4).- Inversión en
justicia conforme a la media europea del 3,5% del presupuesto. 5).-Inmediata
consecución para los jueces de una carga de trabajo asumible que permita resolver los
asuntos con la prontitud y calidad que los ciudadanos merecen. 6).-Aprobación de un
nuevo estatuto judicial acompañado de una reforma de su régimen disciplinario que
termine con su inseguridad jurídica y con su régimen de responsabilidad prácticamente
objetiva y 7).-Establecimiento por ley de un sistema que garantice de manera definitiva
y estable su independencia económica para que no quede sujeta al arbitrio de cada
gobierno de turno.
Pues bien, los escasos meses transcurridos desde entonces han bastado para
evidenciar no sólo la total insensibilidad del Gobierno de la Nación y del CGPJ con
las inquietudes y reivindicaciones planteadas en el Manifiesto sino, peor aún, la
tenaz persistencia de ambos en continuar por esa misma senda expresamente
reprobada por más de 1400 jueces del país. Una senda que por parte del Gobierno
se ha materializado, entre otros aspectos en agudizar su actitud de mas absoluto desdén
hacia todas las asociaciones judiciales, hasta el punto de ni tan siquiera oírlas (tampoco
al Consejo) antes de aprobar mediante Decreto-Ley una reducción drástica y sin
precedentes de nuestros salarios que ha supuesto el mayor ataque perpetrado en nuestro
pais contra la independencia económica de los jueces, y en imprimir mayor celeridad
aún a su proceso de fragmentación y politización del Poder Judicial mediante la
articulación de proyectos legislativos específicamente encaminados a dar carta de
legalidad a la creación de 17 Consejos judiciales autonómicos y a atribuir la instrucción
penal a un M. Fiscal absolutamente dependiente del ejecutivo con paralela postergación
y restricción del democrático ejercicio de la acción popular a ámbitos meramente
residuales o testimoniales. Y todo ello con la complicidad tanto activa como pasiva
del CGPJ quien, no solo ha dejado en evidencia a tal respecto su tradicional posición
dócil al Ejecutivo sino que además ha despreciado ostensiblemente a los más de 1400
jueces firmantes del Manifiesto negándose reiteradamente a recibir a sus Impulsores. Ha
continuado impasiblemente efectuando la designación de cargos de la alta cúpula
judicial con el mismo sistema de cuotas (o reparto de cromos) reprobado en su día por
el TC. Ha incumplido notoriamente su solemne promesa de abanderar las
reivindicaciones de los más de 2100 jueces que siguieron la huelga del 18-2-2009 (en
especial, la del incremento del número de jueces y de la inversión en Justicia) pues
luego de mostrar tras esa huelga y la de octubre ciertos destellos de aparente
acercamiento a sus gobernados (plasmados en algunas flexibles interpretaciones de
nuestro rígido sistema de permisos), ha vuelto nuevamente a la senda dura iniciando,
por ejemplo, el trámite de aprobación de un proyecto de Reglamento de la carrera
judicial que recorta contra legem nuestro ya limitado y discriminatorio estatuto legal
en materia libertad de expresión, de permisos e incluso de nuestra misma libertad
deambulatoria, al tiempo que acentúa aún mas, en muy diferentes aspectos, nuestro
incomprensible status de responsabilidad objetiva por el funcionamiento de una oficina
judicial que nos es legalmente ajena. Proyecto que, en esa misma línea, ha sido seguido
de la más reciente aprobación de una Instrucción en la que, obviando el más elemental
principio de jerarquía normativa, efectúa un ilegal desarrollo de las residuales y
antinómicas facultades de inspección y dirección que anómalamente quedaron en el art.
165 de la reformada LOPJ y que, por su estrecha ligazón con nuestro catálogo legal de
infracciones disciplinarias, va a comportar de facto la definitiva consagración de nuestra
más absoluta responsabilidad objetiva por cualquier mínima irregularidad que suceda
en esa oficina judicial cuyo jefe es otro que, además, no depende legalmente de nosotros
sino del ejecutivo. Y todo ello mientras que, sin el mas leve destello de sensibilización
por parte de ambas instituciones gubernamentales, seguimos teniendo la mitad de jueces
que la media europea y hemos descendido en materia de independencia judicial según el
Word Economic Forum on Judicial Independence al “honorable” puesto numero 57,
detrás de Nigeria.
2.- Propuesta a todas las asociaciones y a los no asociados.-
Pero los Impulsores del Manifiesto, fieles al compromiso contraído con los
centenares de firmantes del mismo no estamos dispuestos a consentir por más tiempo
que esta situación de galopante politización y degradación de la carrera judicial
siga avanzando impunemente y de forma irreversible. Es por ello que, desde nuestra
condición de movimiento transasociativo y de base compuesto de asociados y no
asociados de todas las tendencias en pro de esos siete objetivos básicos de la carrera,
consideramos que ha llegado el momento de dar un firme y unitario PASO
ADELANTE que podrá cambiar sustancialmente la situación si contamos con los
apoyos individuales y asociativos en los términos que a continuación exponemos.
La petición de apoyo individual la dirigimos de manera especial a TODOS
LOS COMPAÑEROS NO ASOCIADOS para que, desde el máximo respeto a las
razones que les hayan podido llevar a no afiliarse a ninguna de las asociaciones
existentes hagan por primera vez un PARENTESIS EXCEPCIONAL Y MERAMENTE
TEMPORAL a su actual status pasando a engrosar de manera masiva e inmediata,
aunque limitada al tiempo máximo de UN AÑO, las filas de afiliados de
CUALQUIERA DE LAS ASOCIACIONES que en el plazo prudencial de 20 DIAS
manifiesten expresamente su COMPROMISO (mediante comunicado oficial dirigido
a esta misma red telemática) de llevar prioritaria y firmemente a cabo todas las
actuaciones que a continuación paralelamente les solicitamos.
Y la petición de apoyo asociativo la dirigimos a TODAS LAS ASOCIACIONES
JUDICIALES con el fin de que se comprometan con la consecución de los 7 objetivos
básicos del Manifiesto, en estrecha y coordinada colaboración con sus Impulsores, y
pongan en marcha a la mayor brevedad las actuaciones siguientes:
1).-Exigencia de Alta Mesa Negociadora.- Las asociaciones dispuestas a
aceptar esta propuesta se comprometen a exigir del Presidente del Gobierno de la
nación y del Presidente del CGPJ la constitución de una MESA NEGOCIADORA
AL MAS ALTO NIVEL (nunca a nivel meramente ministerial o del Consejo) en la
que se aborden como verdadero problema de Estado todas las cuestiones y objetivos
básicos planteados en el Manifiesto. Porque los jueces no somos meros funcionarios
sino un poder del Estado.
2).-Medidas contundentes de presión.- Las asociaciones aceptantes asumen
adoptar cuantas medidas constitucionales de presión progresivas y contundentes
fuesen necesarias, incluida una HUELGA GENERAL indefinida y discontinua de
jueces y magistrados, si en el plazo prudencial que la asociación o asociaciones
protagonistas de este proceso les fije (que sugerimos no supere los 15 DIAS) esas altas
Autoridades no hubieran dado respuesta afirmativa a aquella petición o, celebrado el
primer encuentro personal, no se hubiesen alcanzado acuerdos firmes en cuanto a la
constitución, objetivos y desarrollo de la Alta Mesa Negociadora. Reacción
movilizadora colectiva que igualmente debería adoptarse en cualquier momento en que,
pese a cumplirse esos primeros presupuestos, las negociaciones emprendidas no
hubieren alcanzado resultados satisfactorios relevantes y tangibles en el prudencial
plazo de UN MES. Porque los jueces estamos hartos de promesas volátiles.
3).-Convención Nacional de Jueces.-Paralelamente a todo lo anterior la
asociación o asociaciones aceptantes se comprometen a organizar y convocar una
CONVENCIÓN NACIONAL DE JUECES en el plazo máximo de DOCE MESES
con un doble objetivo: de un lado, para debatir de manera abierta y plural sobre todos
los graves problemas que afectan a la independencia del Poder Judicial en España y a
sus titulares, y de otro, para que todos los jueces y magistrados del país en servicio
activo a ella convocados procedan a elegir democráticamente (con las representaciones
tasadas que procedan) una Junta Nacional Jueces permanente y plenamente
representativa de todos los jueces y magistrados de España. Junta que una vez
constituida, se convertiría en la voz permanente de todos los jueces del país y, al propio
tiempo, en la única fórmula realista y plausible de unidad judicial con la que hoy por
hoy es posible responder a la todavía quimérica unidad asociativa. Porque los jueces no
podemos seguir mas tiempo sin una representación democrática a nivel nacional.
3.-Aclaración final.-
Con esta concreta propuesta los Impulsores del Manifiesto no pretendemos
vincular nuestra organización a asociación alguna ni delegar en ella la lucha por los
principios y objetivos a la que nos comprometimos al participar ese documento a toda la
carrera, como tampoco, por supuesto, está en nuestro ánimo generar ningún tipo de
división entre asociaciones o entre afiliados o no afiliados a las mismas, pues nada más
lejos quedaría del contundente mensaje de unidad que inspira y late intensamente en
todo el texto del Manifiesto. Lo que únicamente perseguimos con este doble envite a
todas las asociaciones y a todos los jueces no asociados (o incluso a aquellos otros
que, aun estándolo, quieran discrecionalmente mostrar de este modo su disconformidad
con la posición que adopte la cúpula de su asociación) es poner en marcha un sólido
FRENTE COMUN para cuyo éxito resulta indispensable engrosar
TEMPORALMENTE (y por muy breve plazo) las filas de cualquiera de las
asociaciones que se comprometan a llevar a efecto esta propuesta Porque sólo una
organización que disponga de una estructura asociativa integrada de una ingente base de
afiliados altamente reivindicativa podrá tener la fuerza y medios suficientes para llevar
fructuosamente a cabo esos objetivos.
Desde el Manifiesto nunca pediríamos ni pediremos a nadie la afiliación en
firme a alguna asociación concreta pues seria tanto como atentar contra la misma
esencia transasociativa de nuestro movimiento. Lo que aquí simple y llanamente
estamos pidiendo a los COMPAÑEROS NO ASOCIADOS es que, dada la situación
limite y extremadamente grave a que ha llegado ya la carrera se hace necesario un
extraordinario esfuerzo de unión solidaria por parte de todos que en el caso de los no
asociados pasa ineludiblemente por la toma de una decisión que sabemos les va a ser
muy difícil y dura: la de, en aras del bien de todo el colectivo judicial, ser capaces, por
una sola vez y de forma absolutamente excepcional, de dejar a un lado sus
arraigados recelos o profundas convicciones antiasociativas procediendo a
integrarse por muy limitado tiempo (máximo un año, o menos incluso) en
cualquiera de las asociaciones que decidan aceptar esta propuesta. Se trataría de un
gesto tan admirable y solidario, pero a su vez tan natural y coherente, como el que
hicieron tantos centenares de asociados y no asociados yendo a la dos huelgas de 2009
pese a no pertenecer o simpatizar con la asociación convocante.
Somos muchísimos los descontentos, usemos inteligentemente nuestra
fuerza.
A 10 de Noviembre de 2010
Los Impulsores del Manifiesto