Los concursos de traslado: un ámbito claramente mejorable y que debería ser desarrollado reglamentariamente.
Publicado: Jue 30 Ago 2018 9:33 pm
Reproducimos por su innegable interés, los comentarios de nuestro compañero Jaime Font De Mora Rullán en el feisbuc:
LOS CONCURSOS DE TRASLADO DEL CUERPO: un ámbito claramente mejorable y que debería ser desarrollado reglamentariamente.
Una vez más muchos compañeros están pendientes de que se haga público el listado provisional del último concurso publicado el pasado mes de julio. La información que se recibe si se llama al Área de Letrados de la Administración de Justicia es escasa o prácticamente nula, remitiendo al mes de septiembre que en breve se inicia. Un triste espectáculo...
Pero más allá de este caso concreto lo cierto es que con los concursos de traslado tenemos un verdadero problema en nuestro Cuerpo por la falta de claridad, transparencia y (todo hay que decirlo) la muy mejorable gestión realizada por el Área de Letrados de la Administración de Justicia y la Subdirección General de Programación de la Modernización de la que depende.
Entre otros muchos aspectos que podrían citarse merece la pena destacar:
1º No tenemos la más mínima seguridad de cuántas convocatorias se van a producir al año. Se supone que dos, normalmente antes de verano y de final de año, pero no está ni mucho menos garantizado ni normalizado que se respete esa "tradición". Una cosa es que puedan convocarse concursos extraordinarios cuando resulte necesario, como por ejemplo para órganos nuevos, o por circunstancias excepcionales como la necesidad de realizar un concurso antes de ofertar plazas a una nueva promoción salida del CEJ. Pero desde el punto de vista de nuestros derechos estatutarios sería conveniente que esa doble convocatoria anual de los concursos ordinarios estuviese bien atada y garantizada. Y además en unas fechas más o menos estables (con una movilidad a lo sumo de 15 días, no más).
2º No tenemos la más mínima información de los plazos que requiere la gestión y tramitación de los concursos, que varían ostensiblemente de unos casos a otros, resolviéndose en ocasiones en cuestión de días y en otros casos en largos e insufribles meses. Siempre hay que andar con especulaciones y quinielas. Tendrían que establecerse unos plazos estandarizados dentro de una horquilla razonable, también de unos 15 días como máximo, para las distintas etapas: tantos días para la publicación de las provisionales desde la convocatoria, tantos para la publicación, etc. Hoy en día está todo (o debería estarlo) informatizado y automatizado.
No parece excusa que los concursos dependan del “factor humano”, del personal del área de Letrados Judiciales y sus posibles vacaciones, bajas, etc. El Área de Letrados de la Administración de Justicia del Ministerio debería ponerse las pilas y trabajar de forma verdaderamente eficiente. El tiempo en que las funcionarias del Área se reunían en una “salita” del Ministerio para ordenar las instancias (lo he visto con mis propios ojos) ya pasó, la famosa "Lali" ya se jubiló: hoy en día se puede informatizar todo el procedimiento. El concurso debería resolver con un “click” si todos los datos están debidamente parametrizados. ¿falta voluntad para ello?
3º ¿Qué pasó con los concursos “a resultas” ? En alguna crónica de las reuniones con el Ministerio se comentaba que se iban a implantar, pero nada se ha hecho hasta la fecha. Esta medida beneficiaría especialmente a las promociones más jóvenes, a los compañeros de tercera, para poder entrar antes a la grandes ciudades, sin perjudicar a los demás compañeros. ¿Por qué no se implanta de una vez ese sistema del que gozan los Cuerpos Generales?
En definitiva, de igual forma que se dictó una instrucción para las Comisiones de Servicio y algo se arregló (aunque para mí es una instrucción “timorata” porque debió obligar a justificar por escrito si quiera minimamente las razones de la concesión, esa hubiese sido la verdadera “transparencia”) viene siendo hora de que se dicte una instrucción u otro instrumento para desarrollar los Concursos de Traslado y que este acto administrativo, que tanto incide en la vida profesional de los integrante del Cuerpo, se desarrollo con la indispensable y básica certidumbre y seguridad, de manera que los compañeros no tengan que estar llamando cada dos por tres al Ministerio para preguntar.
LOS CONCURSOS DE TRASLADO DEL CUERPO: un ámbito claramente mejorable y que debería ser desarrollado reglamentariamente.
Una vez más muchos compañeros están pendientes de que se haga público el listado provisional del último concurso publicado el pasado mes de julio. La información que se recibe si se llama al Área de Letrados de la Administración de Justicia es escasa o prácticamente nula, remitiendo al mes de septiembre que en breve se inicia. Un triste espectáculo...
Pero más allá de este caso concreto lo cierto es que con los concursos de traslado tenemos un verdadero problema en nuestro Cuerpo por la falta de claridad, transparencia y (todo hay que decirlo) la muy mejorable gestión realizada por el Área de Letrados de la Administración de Justicia y la Subdirección General de Programación de la Modernización de la que depende.
Entre otros muchos aspectos que podrían citarse merece la pena destacar:
1º No tenemos la más mínima seguridad de cuántas convocatorias se van a producir al año. Se supone que dos, normalmente antes de verano y de final de año, pero no está ni mucho menos garantizado ni normalizado que se respete esa "tradición". Una cosa es que puedan convocarse concursos extraordinarios cuando resulte necesario, como por ejemplo para órganos nuevos, o por circunstancias excepcionales como la necesidad de realizar un concurso antes de ofertar plazas a una nueva promoción salida del CEJ. Pero desde el punto de vista de nuestros derechos estatutarios sería conveniente que esa doble convocatoria anual de los concursos ordinarios estuviese bien atada y garantizada. Y además en unas fechas más o menos estables (con una movilidad a lo sumo de 15 días, no más).
2º No tenemos la más mínima información de los plazos que requiere la gestión y tramitación de los concursos, que varían ostensiblemente de unos casos a otros, resolviéndose en ocasiones en cuestión de días y en otros casos en largos e insufribles meses. Siempre hay que andar con especulaciones y quinielas. Tendrían que establecerse unos plazos estandarizados dentro de una horquilla razonable, también de unos 15 días como máximo, para las distintas etapas: tantos días para la publicación de las provisionales desde la convocatoria, tantos para la publicación, etc. Hoy en día está todo (o debería estarlo) informatizado y automatizado.
No parece excusa que los concursos dependan del “factor humano”, del personal del área de Letrados Judiciales y sus posibles vacaciones, bajas, etc. El Área de Letrados de la Administración de Justicia del Ministerio debería ponerse las pilas y trabajar de forma verdaderamente eficiente. El tiempo en que las funcionarias del Área se reunían en una “salita” del Ministerio para ordenar las instancias (lo he visto con mis propios ojos) ya pasó, la famosa "Lali" ya se jubiló: hoy en día se puede informatizar todo el procedimiento. El concurso debería resolver con un “click” si todos los datos están debidamente parametrizados. ¿falta voluntad para ello?
3º ¿Qué pasó con los concursos “a resultas” ? En alguna crónica de las reuniones con el Ministerio se comentaba que se iban a implantar, pero nada se ha hecho hasta la fecha. Esta medida beneficiaría especialmente a las promociones más jóvenes, a los compañeros de tercera, para poder entrar antes a la grandes ciudades, sin perjudicar a los demás compañeros. ¿Por qué no se implanta de una vez ese sistema del que gozan los Cuerpos Generales?
En definitiva, de igual forma que se dictó una instrucción para las Comisiones de Servicio y algo se arregló (aunque para mí es una instrucción “timorata” porque debió obligar a justificar por escrito si quiera minimamente las razones de la concesión, esa hubiese sido la verdadera “transparencia”) viene siendo hora de que se dicte una instrucción u otro instrumento para desarrollar los Concursos de Traslado y que este acto administrativo, que tanto incide en la vida profesional de los integrante del Cuerpo, se desarrollo con la indispensable y básica certidumbre y seguridad, de manera que los compañeros no tengan que estar llamando cada dos por tres al Ministerio para preguntar.